dimecres, 19 de setembre del 2012

Hasta luego

Hay que reconocer que ser funcionata en España empieza a ser un oficio no exento de cierto riesgo: reducciones salariales, congelaciones, pérdida de la extra, pronto jubilación a los 80... En resumen, currar más para ganar menos... Encima, todos los viernes sale la Sory después del consejo de ministros a explicar el nuevo hachazo de la semana. Por si esto fuera poco, como además atendemos al público, de vez en cuando hay que soportar a alguno de esos cretinos "emprendedores" de pacotilla, evasores de impuestos a tiempo completo que te suelta el clip de audio de moda en intereconomía, esto es, que el problema de este país es que hay demasiados tipos como tú. "Sobran funcionarios", te dirá, y así se dará aires de analista político. Es práctico el discursillo enlatado, no necesitas ni pensar... Lo sueltas y ya está, queda bien. Luego, si no es cierto tampoco importa tanto. ¿Que la proporción de funcionarios entre la población activa de los países más avanzados de la UE duplica la española? Qué mas da, a mí me vas a venir con estadísticas... Ya lo dice Lakoff, lo que manda es el marco mental.
Así que harto de los carburantes, del IVA, del IBI, del sablazo a las pensiones, de la factura eléctrica, de los tertulianos, de la contrarreforma en TVE, de las gaviotas carroñeras, del fúmbol en general y del Real Mandril en particular, del desmantelamiento de la sanidad pública, de Andrea Fabra y su papá, de los barracones escolares, de un jefe de estado que imparte lecciones de ética pero cuya legitimidad emana nada menos que del Movimiento, que caza elefantes al módico precio de tres salarios mínimos anuales la pieza (las elefantas y las copas se las ponen de gratis), de los jefes, de los chaqueteros (especialmente de la unión de ambos conjuntos) y harto también de muchas otras cosillas que sería innecesario añadir, he decidido cambiar de aires. Y aprovechando que desde que cumplí los cuarenta me dedico a hacer oposiciones y encima las apruebo, voy a incorporarme al cuerpo de Médecins Inspecteurs de Santé Publique de la administración gabacha.
De modo que ya sabéis, "Pepe, vente a Alemania", versión remasterizada, el jabugo y el cantimpalo pueden ser envasados al vacío y el vinito de Jumilla se encuentra sin demasiadas dificultades en el super. Añadid que las baguettes y el queso de productor están de muerte y ya tenemos un interesante mestizaje... Yo soy un proletario (como sabéis, tengo mucha prole) y el proletariado no tiene país. ¡Fuera fronteras!
No es que me mate de ilusión el señor Hollande, no es mi tipo. Soy sociata, sí, pero tendencia Marx-Engels... No obstante, mientras esperamos el advenimiento de la república socialista mundial (die sozialistische Weltrepublik) hay que reconocer que la socialdemocracia europeísta ofrece un entorno de vida bastante más amable que la carcundia tardofranquista nacional... Vamos, que no hay color. Educación pública gratuita y de calidad, servicios sociales, actividades de tiempo libre, oportunidades laborales, buenos salarios... Y bien, ¿para qué extendernos más? En estos años, los mayores de la guardería tienen que completar el primer ciclo de estudios universitarios. El abanico de posibilidades es amplio, interesante y motivador.
Hace ya dos semanas que estamos instalados en una tranquila ciudad de los suburbios de Rennes, Bretaña, donde está la École des Hautes Études en Santé Pubique. Aquí pasaré el próximo año de formación a cargo del Estado. A partir de septiembre próximo migraremos a Versailles, donde está mi plaza definitiva, en una delegación territorial de la Agence Régionale de Santé de la región parisina. Y luego yá se verá. Por lo pronto, ya tenemos una casa habitable (loado sea IKEA, extraordinario invento nórdico!), los días de vacaciones transcurren apaciblemente, los carriles bici están por doquier, el tiempo es fresco pero apacible y muy soleado y los extensos parques urbanos empiezan ya a vestir tonalidades de otoño. Los chicos en sus institutos /colegios, los deportes, Ligia con sus créditos que le quedan en la Universidad Rennes 2 y yo ya tengo una nueva banda de música con la que ensayo los miércoles. En dos palabras, la vida sigue.
Os echaré de menos y espero que coincidamos en algunas vacaciones.
Mientras tanto, reactivaré a mi antiguo alter ego para pasar noticias de vez en cuando:
Y esto es todo de momento, amiguetes. Cuidaos mucho y take it easy, que el otoño que se avecina promete ser caliente.
Abrazos
Hèctor